TALLER 2
Objetivo: Reconocer el nivel de autoestima a
través de actividades prácticas y significativas.
Contenidos: autoestima.
Estrategias: lectura en el blog
institucional.
Recursos: colores, marcadores, cuaderno,
lapiceros, computador, internet, hojas de bloc, entre otros.
Tiempo: una sección (2 o 3 horas)
virtual y 3 secciones presenciales.
DESARROLLO
DE LA ACTIVIDAD: las siguientes dinámicas y
actividades de autoestima son para ser jugadas y no para ser sufridas. “Nada de
lo que yo haga por vía del esfuerzo podrá superar lo que haga por inspiración
con alegría y libertad”.
La vida debería ser un juego, una exploración,
un camino que recorro con alegría y expectativas optimistas. Con esa misma
intención entro a jugar con las prácticas que se ofrecen en esta página.
La mayor parte de estos ejercicios de
autoestima los puedo hacer sol@ y mejor todavía si puedo compartirlos con
alguien.
No hay manera de hacerlos mal, si me mantengo
fiel a la instrucción y me aseguro de sentir una emoción positiva.
No hay un orden específico – puedo
realizar cualquiera de las actividades de autoestima de manera independiente.
Actividades
de autoestima I: La racha de
apreciación.
Estas actividades de autoestima
consisten en encontrar cualquier cosa que tenga algo de valor. Me propongo
encontrar al menos 21 cosas que pueda apreciar. Si puedo las escribo.
La intención es que yo logre cambiar mi
manera de ver la vida y aprecie cada vez más y desprecie cada vez menos.
A.- Puedo sentarme en mi cuarto y
observar lo que me rodea.
“Me gusta esta cama, disfruto este
silencio, me gusta como ladra aquel perro, la temperatura es perfecta, ese
libro es genial, la música de XX es buenísima, este es mi pantalón preferido,
disfruto este ejercicio...”
B.- Puedo apreciar a una persona en su
presencia o su ausencia.
“Me gusta tu sonrisa, aprecio cómo te
vistes, valoro mucho lo que me dijiste aquella vez, eres honesta, simpática y
linda, aprecio que buscas siempre la justicia, tu mirada es transparente,
vistes muy alegre, siento tu energía constructiva, siempre andas buscando algo
mejor...”
C.- Escribo una lista de las cosas que
aprecio de mí mism@.
“Soy bienintencionado, soy responsable,
me gusta mi pelo, soy capaz de amar, soy bueno en las matemáticas, sé ahorrar
por poco que sea, conduzco bien, cuido las plantas con cariño, acepto mis
debilidades, disfruto la compañía de tales amigos, lavo los platos muy bien...”
Puedo inventar muchos otros ejercicios
de apreciación si me lo propongo.
Actividades
de autoestima II: Te veo la esencia
Es ideal si puedo hacer estas
actividades de autoestima con otra persona cercana que vibre muy armónicamente.
Pero igual puedo hacerlas sol@ y escoger personas cercanas. Si quiero, les
puedo comunicar luego lo que hice, pero no es necesario.
“Respiro profundamente y me inspiro. Por
encima de todas las pequeñeces, defectos y limitaciones que en otros momentos
pueda observar en ti, en este momento lo único que quiero es ver tu mejor parte.
Te veo a los ojos y traspaso detrás. Observo tu energía pura, vibrando,
viviendo, fluyendo. Percibo la grandeza de tu ser, puedo ver tu fuerza
interior, tu sabiduría y tu libertad aunque no la manifiestes con frecuencia.
Puedo sentir la grandeza de tu ser. Respeto profundamente eso que observo, tu
eternidad, tu alma, tu parte más sabia e inspirada. Puedo ver claramente tu
potencial y me asombras. Te quiero, te aprecio tanto...”
Actividades
de autoestima III:
Lista de nueve
momentos en mi vida en que he tomado una decisión, asumiendo el control de mi
vida.
“Aquella vez que le dije a mi padre que yo
quería dejarme crecer la barba, cuando elegí cambiar de carrera; cuando me
alejé de mis amigos porque queríamos cosas diferentes; el momento en que corté
con aquella novia porque exigía toda mi atención; cuando decidí que ya era hora
de cambiar...”
¿Puedo
recordar la emoción que sentí en cada uno de esos momentos? ¿Puedo permitirme
sentir esa emoción ahora - sentirme así en este instante?
Si me siento bien he identificado algo
bueno. Si me siento mal, lo suelto y busco otro ejemplo que me haga sentir
bien. Lo importante es traer al presente esas emociones tan positivas.
Actividades
de autoestima IV: Afiche de la vida de
mis sueños.
Este es un proyecto que todas las
personas deberían hacer varias veces en su vida. La descripción completa la
encuentro en Afiche de la vida de mis sueños.
Es insospechado todo lo que genera este
ejercicio de autoestima.
Actividades
de autoestima V: Mañana sorprenderé a
tres personas.
Mañana voy a decirles algo maravilloso a
tres personas que no esperan nada de mí.
“Sorprenderé a la persona que limpia la
oficina diciéndole que hace un trabajo excelente, que los pisos están
relucientes y que sin su trabajo ese lugar no sería igual. A la señora que
prepara los almuerzos le diré que valoro mucho su intención de complacernos a
los comensales, que las brócolis de los jueves son mis favoritas y su
permanente sonrisa me inspira mucho. A mi hija la abrazaré y le diré que la
quiero, que deseo lo mejor para ella y que me disculpe por las veces que la he
hecho sentirse mal.”
Lo extraordinario de estas actividades
de autoestima es que en minutos logro elevar el nivel de vibración de quienes
reciben mi aprecio. Les transformo el día y dejo una huella imborrable. Pero
más impresionante aún es el efecto que esto tiene en mí.
Actividades
de autoestima VI:
Describo nueve cosas
que me gusta mucho hacer y me explico las razones por las que me voy a permitir
hacerlas más.
“Me gusta muchísimo andar a caballo. Me lo voy
a permitir más porque me hace sentir libre, disfruto el aire, el sol y la
naturaleza, es un buen ejercicio, me relajo y olvido el mundanal ruido. Lo voy
a hacer más porque me gusta, me da la gana y me lo merezco. Me gusta hacer
yoga. Voy a inscribirme en un curso y trabajar con mi cuerpo. Me fortalece, me
flexibiliza, me da un espacio de meditación, un encuentro conmigo mism@. Me
gusta...”
Esto es transformación en vivo. Esta
práctica me va a generar beneficios valiosísimos.
Actividades
de autoestima VII:
Describo nueve momentos en que he realizado un
sueño – pequeño o grande – y la emoción que sentí al verlo realizado.
“Cuando a mis seis años ahorré durante seis
meses para comprarme el carrito de baterías. Recuerdo que dormía con él, lo
limpiaba tres veces al día y hasta lo puse a subir platos en la cocina. Me
sentía completo, feliz, realizado. También recuerdo cuando me propuse hacer
ejercicios para desarrollar músculos. Me sentía muy fuerte, saludable y
atractivo. La vez que decidí construir una “casa” en el árbol – qué inspiración
tan buena, qué logro fue recolectar la madera y clavar esos clavos. Me sentía
exitoso y capaz...”
¿Puedo permitirme sentir esa emoción
ahora, en este instante? ¿Puedo sentir esa energía y soñar algún sueño ahora –
por lo pronto algo pequeño y fácilmente alcanzable?
Este ejercicio es estimulante y la base
de todo lo bueno que vendrá.
Actividades
de autoestima VII: Dejar ir, soltar,
aflojar, liberar.
Describo nueve momentos en mi vida en
que he dejado ir algo y me he sentido liberad@. La intención es que la
sensación de libertad, de liviandad, de soltura la pueda recrear en este
instante.
“El momento en que solté un trabajo muy
bien pagado y de mucho prestigio, para recuperar mi paz, mi libertad y la
flexibilidad de horarios. Sentí que solté un enorme peso que cargaba cuesta
arriba. Asumí el control de mi vida. Otro caso es cuando dejé ir a mi primera
esposa que murió y me quedé con cuatro hijos. La recuerdo con cariño, pero la
dejé ir en paz. Me liberé de un apego y procesé el duelo con mayor facilidad.
Fue liberador. Otra experiencia fue cuando...”
Este ejercicio de autoestima me permite
re-crear en el presente la sensación de libertad, de fortaleza interior y de
desapego tan importante para elevar mi autoestima.
¿Puedo imaginar que soy capaz de
liberarme de otras cosas que me atan o limitan en este preciso momento? ¿Puedo
permitirme imaginar cómo me voy a sentir cuando suelte todo eso?
Actividades
de autoestima IX: Hablando con mi niño
interior.
Voy a imaginar que puedo sentarme con
mucha tranquilidad a hablar con el/la niñ@ que fui a los 2, 4 y seis años.
Voy a darle mucho cariño, a escuchar sus
hazañas y sus penas. Con paciencia y amor le presto toda mi atención.
L@ abrazo cuando me cuenta sus congojas
o frustraciones y l@ felicito por sus logros. L@ estimulo a que me cuente lo
que más le gusta. Nos reímos junt@s, me abro a escuchar sus confidencias y le
prometo aprobación incondicional.
Quiero darle mucho amor, quiero que sienta
esperanza, que confíe en que la vida puede ser maravillosa.
Quiero que se sienta muy segur@, que es
amad@ y que estaré siempre a su lado.
Es fundamental que mi aporte sea alegre,
esperanzador, amoroso, de aumentar la confianza y de fortalecerl@ y liberarl@.
Si logro que mi niño interior sane
algunas heridas y mejore sus actitudes en algunos aspectos, estoy trabajando
por el bienestar de ambos.